A la hora de hablar de los tipos de implantes mamarios que podemos usar en una cirugía estética de aumento o reconstrucción del pecho, es importante tener en cuenta que hay más aspectos que el tamaño a tener en cuenta. La forma del implante, la naturalidad del acabado y el material del que está hecho son puntos que determinarán el resultado y que consideramos en el estudio inicial de la paciente.

Pero ¿cuáles son estos aspectos? Sigue leyendo porque te hablamos de las distintas opciones entre las que podrás elegir a la hora de hacerte una cirugía mamaria.

Tipos de implantes mamarios en función de su forma

Principalmente, hay tres tipos de implantes mamarios entre los que elegir según su forma: redondos, anatómicos y ergonómicos. A continuación te hablamos de sus características.

Implantes redondos

Tienen el mismo relleno en el polo superior y en el inferior, por lo que aportan volumen de forma homogénea a la mama. La desventaja es que, sobre todo en pacientes delgadas con poco pecho, pueden verse menos naturales que otros implantes; la ventaja, que no se notará un cambio en la forma incluso si se mueven o se giran.

Implantes anatómicos

Son prótesis en forma de lágrima, más estrechas en el polo superior, que imitan la forma del pecho y se ven, por lo tanto, más naturales. Tienen, sin embargo, una desventaja: si se produce una rotación del implante, este movimiento será visible.

Implantes ergonómicos

Los implantes ergonómicos son una excelente opción para conseguir un resultado natural de la cirugía mamaria y los que utilizamos en la actualidad. Compuestos por gel cohesivo de silicona, presentan una textura más blanda y son capaces de adaptarse al tejido mamario y al movimiento de la paciente, por lo que puede apreciarse una forma bonita y natural en cualquier posición.

Tipos de prótesis mamarias en función de su composición

De silicona o suero salino, con superficie lisa o rugosa: las características de los distintos tipos de prótesis mamarias varían según su composición.

Implantes de silicona o suero salino

El interior de una prótesis mamaria puede ser de silicona o suero salino. La ventaja del suero salino es que, en caso de que el implante se rompa, el cuerpo lo absorbe naturalmente, por lo que no da ningún problema. Sin embargo, es más fácil que se rompa que la prótesis de silicona y, además, suele presentar un aspecto menos natural.

La silicona, por el contrario, se caracteriza por su cohesión. Esto significa que, en el caso de que se rompa la cobertura del implante, es menos probable que se salga.

Superficie lisa o rugosa

La cobertura de los implantes mamarios suele ser de silicona. No obstante, podemos encontrar diferencias, pues algunos tienen una superficie lisa y otros se caracterizan por una superficie rugosa.

La ventaja de los implantes con una superficie rugosa es que estos se adhieren mejor al tejido, por lo que hay menos riesgo de que se muevan. Además, hay menos probabilidad de que se produzca una contractura capsular.

Evidentemente, más allá de todas estas características, podrás elegir entre distintos tamaños según el aspecto que quieras conseguir. Para ello haremos un estudio previo de tu caso en el que podrás plantearnos todas tus dudas y descubrir todas tus opciones.

Si quieres saber más sobre los distintos tipos de implantes mamarios, contacta con nosotros y solicita cita previa.

Abrir chat
1
💬 ¿Necesitas ayuda?
Scan the code
¿Necesitas ayuda?